UNA MENTE COLMENA QUE DISEÑA ARQUITECTURA HOSPITALARIA

¿Cómo definiría la arquitectura de Enero Arquitectura? ¿Tienen una cualidad común que les identifique?

La palabra Enero tiene la connotación del cambio, de los nuevos retos y propósitos del año, del comienzo de un nuevo ciclo. Nuestra arquitectura es eso: un nuevo punto de partida o punto de vista, en definitiva, lleva implícita la idea de superación. Gracias a este espíritu constante, crecemos en cada proyecto, exploramos nuevas vías y ofrecemos soluciones mejoradas. Este es el principal eje sobre el que se basa nuestra arquitectura.

¿Qué les hace diferente a Enero frente a otros estudios?

 

El hecho de dar un enfoque distinto en cada proyecto, genera obligatoriamente la necesidad de trabajar de forma distinta. ENERO, funciona como una mente colmena en la que estamos todos conectados de forma transversal, nunca piramidal. Esto nos permite descubrir las mejores ideas y no la predominantes. Los proyectos son una evolución de ese conocimiento y por eso no tienen un estilo predefinido. Me complace ver como una misma metodología de trabajo, genera infinitas posibilidades o resultados. Además, la paulatina incorporación de la inteligencia artificial en nuestras herramientas de trabajo, nos permite potenciar aún más esa evolución.

 

Con más de 2.000.000 m2 de proyectos realizados, de los cuales la gran mayoría son de arquitectura hospitalaria ¿qué les hace ser uno de los estudios más valorados en este aspecto?

 

Las ofertas o invitaciones que nos están llegando últimamente vienen porque ofrecemos un nivel de diseño e innovación sobresalientes para un nicho en el que lo funcional ha marcado siempre la demanda. Para ENERO, con más de 17 y yo personalmente, con más de 27 años de experiencia en el sector sanitario y todo ese bagaje de m2, el aspecto funcional lo podemos garantizar. Por eso nos podemos permitir el lujo de ir más allá, explorando nuevas ideas o solucionando nuevos retos.

 

LA ESPECIALIZACIÓN COMO ESTRATEGIA

¿Por qué se han especializado en el ámbito de la arquitectura hospitalaria para desarrollarse? ¿Considera que la especialización es una garantía de mejor arquitectura?

 

El inicio de la especialización surgió de forma accidental … o no. Lo que es cierto es que casi toda mi familia está formada por médicos: padre, madre, abuelos, tíos, etc. He mamado muchas horas de hospital desde pequeñito. Cuando en 2º de carrera, decidí empezar a trabajar para experimentar el lado práctico de la carrera, entré en un despacho especializado en hospitales. Así que no sé hasta que punto la especialidad es accidental o no. En cualquier caso, es lo que nos hace ser fuertes en nuestro sector, el gran conocimiento atesorado por muchos años de experiencia.

 

Por ser una arquitectura tan específica, ¿qué cuestiones son las que más condicionan a un arquitecto en un proyecto de arquitectura hospitalaria? ¿En sus bases difiere mucho de cualquier otro tipo de arquitectura?

 

Como decía antes, la función es la pieza clave sobre la que gravita la conceptualización de la arquitectura hospitalaria. El discernimiento de los diversos circuitos y sus compatibilidades, la conexión entre unidades diversas y el conocimiento de diferentes formas de usar o gestionar los edificios, son clave. Ahora bien, si sólo nos quedamos en eso, nos perdemos todo un mundo de avances en aspectos que nos parecen tremendamente relevantes como la experiencia de paciente, el uso “invisible” de la

tecnología, la sostenibilidad, por poner algunos ejemplos.

 

ARQUITECTURA HOSPITALARIA PARA LA CURACIÓN

Arquitectura que cura, ¿podría explicarnos la importancia que tienen distintos aspectos para conseguir estimular las emociones y conseguirlo? (iluminación, materiales…)

Es obvio que el entorno nos condiciona. Todos hemos estado en sitios de los que queremos huir y sitios en los que queremos quedarnos. Bajo esta sencilla apreciación, se esconden infinitos matices que la ciencia ha descubierto por los cuales nos sentimos mejor o peor según en qué tipos de espacios estemos o qué tipos de personas seamos. Utilizar estos estudios científicos en favor de una arquitectura hospitalaria cuyo propósito último es curar a las personas es una obligación autoimpuesta. Por eso estudiamos la iluminación natural, el sonido, la textura, el color, las formas, etc. para incidir sobre estos aspectos de forma positiva. Nuestros edificios curan, lo podemos asegurar.
valor y queremos que lo siga siendo.