Vivienda de Torrelodones

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Una vivienda integrada en la naturaleza.

La vivienda construida por ENERO en la urbanización La Berzosilla, en Torrelodones (Madrid), supone la traslación a edificio habitacional de los valores de nuestro estudio. Realizamos una vivienda en la que el diseño, el bienestar y la sostenibilidad, fueran posibles gracias a la experiencia y la tecnología aplicadas por nuestro equipo multidisciplinar y colaborativo.

 

La característica principal del solar de la vivienda es su proximidad al Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, por ello, fue preciso realizar un proceso y estudio previo con la intención de realizar la integración estética y paisajística de la vivienda en el entorno, poniendo en valor el carácter natural de la parcela. Para este proyecto fue analizado el entorno de la parcela, teniendo en cuenta la topografía, afloraciones rocosas, clinometría, soleamiento, climatología, viento, vistas, vegetación, etc, para poder establecer la estrategia de implantación del proyecto en ese contexto concreto y conocido. La solución arquitectónica a estas circunstancias fue el diseño de un edificio orgánico, perfectamente integrado en el paisaje mínimamente intervenido.

 

Siendo la vivienda de planta única, se consideró su ordenación en un volumen alargado, de orientación Norte-Sur, para maximizar el asoleamiento en invierno y la ventilación en verano. La fachada Norte se relaciona de manera directa con el jardín y el horizonte, facilitando el aprovechamiento de sus vistas, mientras la fachada Sur permite el acceso de la iluminación natural y el calentamiento solar, con vistas al paisaje rocoso interior. El eje Este-Oeste relaciona la vivienda con el aparcamiento, habiendo sido situados los espacios más públicos en el extremo Oeste y los privados en el Este, mientras el eje transversal une el acceso peatonal con la piscina. La distribución interna sigue una geometría ortogonal, y las estancias se agrupan dislocando la regularidad de la planta en los cuatro puntos de acceso. La vivienda se alinea con la base del triángulo óptimo y plantea la piscina en perpendicular hacia el vértice Norte.

 

Al superponer las distintas áreas idóneas para la ubicación de la vivienda atendiendo a los distintos aspectos analizados se obtiene una envolvente de forma triangular. Por otro lado, el desnivel puntual entre la calle y la parcela se aprovecha para plantear el aparcamiento en una plataforma que esconde debajo una edificación auxiliar semienterrada y separada.

 

El elemento característico de la vivienda es la cubierta a dos aguas de corte orgánico, que contrasta con la ortogonalidad de la planta. El tejado se extiende con aleros irregulares para resguardar los accesos y permitir mediante su trazado el control del soleamiento, protegiendo las fachadas del sol estival pero favoreciendo el sol invernal. Los faldones de pendiente constante generan aleros inclinados con su recorte diagonal y las aguas se recogen en un canalón corrido que remata todo el perímetro. La cubierta se alarga al Oeste del salón-comedor permitiendo el aprovechamiento de un gran porche que amplía la zona pública al exterior.

 

La dualidad ente muros y cubierta desarrolla la filosofía estética de la edificación, lo estereotómico en balance con lo tectónico, lo pesado en equilibrio consistente con lo ligero, lo artificial en armonía con lo natural. Los muros, entendidos como la extensión vertical de los afloramientos rocosos del entorno, están resueltos con grandes costeros de granito, mientras el tejado de acabo industrial, se posa como elemento ligero encima. El intersticio entre ambos sistemas constituye un conjunto de huecos, para una casa de cristal integrada en su paisaje.

FECHA: 2017
LOCALIZACIÓN: Madrid